lunes, 17 de marzo de 2014

La gasolina duró 22 minutos (85-58)

(foto: ACB Fotoclick)

El Obradoiro se llevó una dura derrota por 27 puntos en tierras aragonesas ante un CAI que rompió el partido en el tercer cuarto con una catarata de triples. El Obra aguantó con mucho empeño con su corta rotación actual durante el primer tiempo, que se convirtió en una montaña rusa de parciales a favor y en contra que dejó las cosas muy igualadas tras una buena salida de tercer cuarto (43-40). Sin embargo, la profundidad de banquillo local se acabó por imponer ante un Obra que sigue muy corto de efectivos. Los triples de Tabu llevaron el +16 al marcador en una abrir y cerrar de ojos (59-43), aunque el Obra todavía peleó por su suerte hasta los últimos 8 minutos (64-52). En ese momento se acabó la resistencia de los nuestros, que se hundieron ante el acierto en el tiro y la evidente superioridad zaragozana con un parcial final de 31-6. El Obradoiro se queda en la décima plaza con esta derrota, con un record de 10-13, a 2 victorias del playoff y con 4 de renta sobre el penúltimo clasificado. En el horizonte, el partido casi definitivo para la permanencia, el sábado en Sar contra el Fuenlabrada.


El Obra llegaba a Zaragoza todavía en cuadro, a pesar de la incorporación de Travis Peterson, pero todavía sin Oriol ni Iñaki Sanz, y con Scott inscrito pero sin estar en condiciones. Moncho Fernández apostaba de salida por Rafa Luz, Corbacho, Pumprla, Delas y Stobart, ante un CAI en el que comenzaban Llompart, Stefansson, Rudez, Sanikidze y Norel. El Obra comenzaba llevándose sorprendentemente los rebotes de ataque, con Delas muy centrado y Corbacho clavando el triple a la segunda. Norel hundía la defensa obradoirista para facilitar tiros librados como el de Rudez, aunque Rafa Luz respondía con otro triple más. El pivot holandés del CAI era muy superior a un Stobart voluntarioso, pero Delas estaba muy activo y mantenía al Obra por delante. Otro rebote en ataque, esta vez de Pumprla para anotar en el segundo esfuerzo, pero Rudez anotaba su segundo triple para empatar el partido. El CAI empezaba a carburar y los triples caían uno detrás de otro, con el Obra encallado en ataque. Otro triple más, ahora de Llompart, completaba un rápido parcial de 10-0 que obligaba a Moncho Fernández a parar el partido (18-10). El parcial seguía abierto con otro contraataque y el mate de Jones, y otra más del rocoso pivot local para el +12 (22-10), pero el Obra se rehacía para al menos parar la hemorragia, gracias a la entrada de un Berzins que aportaba desde el principio en tiros, rebotes y tapones. Un triple de Tabu volvía a aumentar la renta máxima del CAI a un +13 sobre la bocina del final del cuarto (27-14).

Con 27 puntos encajados en un cuarto poco se podía hacer, así que había que empezar por la defensa. El Obra reaccionaba con un triple de Dewar y 3 libres de Corbacho, pero el CAI seguía destrozando el partido desde los 6,75, ahora por medio de Roll. Peterson debutaba con lógicos problemas para situarse en la cancha, pero el Obra comenzaba a reducir diferencias poco a poco, de nuevo con Rafa Luz al mando, con una buena suspensión lateral de Peterson y una trabajada canasta de Berzins. La defensa frenaba mejor al rival y Peterson volvía a mostrar su buena mano en otro tiro, aunque Norel seguía sin rival en la pintura. Corbacho no tenía un buen día en el tiro, con tiros muy forzados y punteados, y Peterson tenía problemas para imponerse en un par de acciones bajo el aro rival. Con Norel de nuevo castigando bajo el aro obradoirista, las ventajas del CAI se iban a los 15 puntos tras un par de tiros libres de Llompart (43-28). El match-ball era salvado a trompicones con el esfuerzo de Dewar y Rafa Luz, y un par de libres de Peterson y un triple de Corbacho con el defensor golpeándolo. El Obra se iba con ese 0-7 al descanso con solo 8 puntos de desventaja, aunque las sensaciones no eran nada buenas (43-35).

El Obra entraba con buen pie en el tercer cuarto, con una buena canasta de Delas y un lejano triple de Rafa Luz que cerraban un parcial de 0-12 arrastrado desde antes del descanso (43-40), e incluso con Peterson fallando un triple para empatar. Sin embargo, ahí se acababa la resistencia de los nuestros: triple de Roll, pérdida de Peterson, canasta en el poste bajo de Rudez sobre Pumprla, rebote de Norel y transición rápida rematada con un 2+1 de Norel sobre Pumprla. Corbacho cortaba la sangría con un triple, pero el Obra se comía ataque tras ataque y solo cabía esperar la rotura final en cuanto los locales volvieran a meter un par de tiros. El ejecutor caísta era Tabu, que con un par de triples elevaba el +16 al marcador (59-43), para un parcial de 16-3. Aún se aferraba el Obradoiro al partido gracias al triple de un luchador Delas y a un par de buenas defensas del equipo culminadas con una canasta de Berzins para bajar a 10. Una canasta del inspirado Tabu y un fallo de Berzins bajo el aro cerraban el tercer cuarto con 12 puntos de distancia (61-49), con el Obra todavía con vida.

La vida del Obra duraba poco. Norel anotaba, Corbacho daba un mal pase, Rudez clavaba otro triple y las diferencias se iban ya a 17 puntos (66-49). Corbacho seguía desacertado en sus pases, aunque Dewar con un triple y Berzins con un mate en transición tras asistencia de Xanthopoulos mantenían una tenue llama de esperanza (66-54). Era el último aliento del Obra, ya que tras el tiempo muerto local llegaban 3 triples consecutivos, de Rudez, Roll y Tabu, que ya rompían el partido definitivamente (74-56), aunque Moncho Fernández solicitara tiempo muerto. El Obra ya no tenía más argumentos y el CAI comenzaba a jugar a placer, dominando el rebote, corriendo y anotando con facilidad. Las diferencias superaban ya los 20 puntos y en los 6 minutos finales el Obra solo iba a ser capaz de anotar una única canasta, por medio de Peterson. Los locales tampoco buscaban hacer más sangre y los minutos de la basura no aportaban más que reseñar, quizás las ganas y buenas maneras de Homs, hasta llegar la diferencia a los 27 puntos finales. La realidad se imponía con rotundidad y el Obra caía claramente víctima de un buen rival y de su inferioridad por las bajas de las últimas semanas. No siempre se pueden hacer milagros.

Datos a destacar

  • el milagro ya se había dado en Las Palmas, y ante el Real Madrid Sar había dado alas a los nuestros para luchar hasta el final. Sin embargo, ante un fuerte CAI se vio cómo el Obra ahora mismo está muy mermado como para competir a muy alto nivel. Sin Oriol, Scott ni Sanz y con un Peterson recién llegado y con el normal despiste, poco se podía oponer ante los aragoneses
  • 104-54 en valoración, 40-29 en rebotes, 57-27 en porcentaje de triples. Diferencias muy grandes que impedían competir por el partido. Norel fue el rey en las zonas y por encima los tiradores del CAI destrozaron a una defensa obligada a cerrarse ante el holandés para intentar compensar la falta de juego interior. Si además faltó el acierto en el tiro, es claro que las opciones de ganar eran mínimas
  • KASPARS BERZINS: dentro de lo que cabe, el letón volvió a mostrar buenas maneras en la cancha, aunque esos errores en ataque bajo el aro son desconcertantes. Aportó energía y se defendió en el puesto de pivot aunque se note que no está muy cómodo tan dentro de la pintura. Con la vuelta de Oriol puede ser muy interesante verlo junto al capitán en cancha. 10+8+1, con 3 tapones, para 14 de valoración
  • RAFA LUZ: poco pudo aportar en esta ocasión el brasileño. Tuvo que tirar varios triples (hasta 6) antes de comerse posesiones y le costó encontrar a sus compañeros. Peleó como siempre en defensa, pero estuvo a un nivel más gris que en partidos anteriores. 6+2+4, con 3 pérdidas, para 1 de valoración
  • ALBERTO CORBACHO: bien defendido y obligado a tiros forzadísimos, el mallorquín no tuvo su mejor día. Intentó meter balones a los interiores con luces y sombras, y aún con todo fue el máximo anotador del equipo. Sin juego interior fuerte, defender a Corbacho es ahora mismo la prioridad absoluta de las defensas rivales, y días heroicos como el de Las Palmas no se pueden tener de manera continua. 12+3+3 para 11 de valoración
  • PAVEL PUMPRLA: trabajador como siempre, aunque con muchos problemas ante Rudez en defensa. Tuvo que tirar varias pedradas de final de posesión, ante las dificultades en ataque del equipo. 5+4+4+3 para 11 de valoración
  • MARIO DELAS: buena actitud del croata, intentando cosas correctas y peleando en inferioridad física ante tipos como Norel. Obligado a jugar más interior de lo que debería por las circunstancias del momento. De lo mejor del equipo, más allá de los fríos números. 7+6+1, con 3 pérdidas, para 8 de valoración
  • MICKY STOBART: bajaron sus minutos con la llegada de Peterson (hasta 9 y medio), en los que el mallorquín puso todo de su parte como es habitual. Sin embargo, su inferioridad física y técnica fue clara, lo mismo que su profesionalidad y espíritu de lucha. 0+1 para -4 de valoración
  • TRAVIS PETERSON: debutó mostrando su buena mano en la media distancia y también su blandura en la zona, tanto en ataque como en defensa. Despistado en la cancha, lógico tras 3 entrenos solamente. Como ala-pivot abierto puede ser muy útil cuando vuelva Oriol. 8+2 para 1 de valoración
  • BEN DEWAR: buenos minutos, con acierto en el tiro y valentía en las penetraciones; en defensa aportó intensidad pero sin tanto éxito. Será importante en los partidos que faltan para conseguir la permanencia. 10+1 para 11 de valoración
  • VASSILIS XANTHOPOULOS: con problemas para dirigir al equipo, para defender a Tabu y para controlar las faltas (4 en apenas 14 minutos). Falto de autoconfianza y con exceso de presión en la cancha. 0+0+5 para 0 de valoración
  • ALBERT HOMS: mucho desparpajo en sus 5 minutos en cancha. Intenta cosas y no se esconde, aunque es evidente que todavía le falta bastante. Con todo, buenas impresiones del catalán. Estadística a 0, para 0 de valoración
El Obradoiro tuvo que rendirse a la evidencia de su momento actual y acabó cediendo con cierto estrépito ante un CAI muy superior. La rotación del equipo ahora mismo recuerda peligrosamente a aquellas de la segunda vuelta del debut en ACB, con la diferencia sustancial de la situación clasificatoria del equipo. La meta fundamental del Obra está muy cerca de ser conseguida, y la pena es que justo en el mejor momento de la temporada las ilusiones de dar la campanada se vinieran abajo en un par de días con la lesión de Junyent y la marcha de Muscala. No es solo la cortedad de la rotación en los partidos, sino la poca calidad de los entrenamientos con solo 8 jugadores senior y la adaptación de jugadores nuevos a la dinámica de la plantilla. Con la presumible vuelta del capitán para el partido del próximo sábado, el juego del equipo debe poder tener más argumentos en su rotación interior, ya que Peterson es un 4 abierto del que en principio no se han de esperar grandes gestas en la pintura. La ventaja con los puestos de descenso es sustancial y el objetivo del Obra ha de ser refrendar con un par de triunfos como mucho una permanencia que de por sí ya debería de ser festejada como un éxito enorme para el club. El partido del sábado ante el Fuenla cobra por ello mayor importancia si cabe, y el apoyo de la grada puede ser fundamental para amarrar el triunfo número 11.

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